viernes, 19 de diciembre de 2008

El Presidente Saca comienza a retractarse

Tomado de Diario Colatino

Recién se dio la filtración de las fotos de un acto cultural del año pasado, en El Paisnal, donde aparecen jóvenes ensayando una “parada militar”, para conmemorar un aniversario más de la muerte del comandante guerrillero, Dimas Rodríguez, el Presidente Saca, quien viajó a Estados Unidos, a despedirse de George W. Bush, anunció que había dado instrucciones a su canciller, para que denunciara ante la ONU y la OEA, el hallazgo de arsenales y entrenamiento militar en la población de El Paisnal, y en 39 sitios más en territorio salvadoreño.

Tanto el alcalde de la mencionada población, como pobladores de la Comunidad “Dimas Rodríguez”, dijeron una y otra vez, que las armas para el ensayo y para la “parada militar”, parte del acto cultural conmemorativo, eran de juguete.

Este diario envió a periodistas a El Paisnal, y comprobó, en efecto, que las armas son de juguete.

La alharaca del Presidente Saca, en Washington, así como de los Ministerios de Defensa y Seguridad Pública, con el acompañamiento de los medios de comunicación de derecha, parece que en el exterior no pasará a más.

Mal haría la ONU y la OEA, en prestarle atención a ese tipo de escándalos, propios de autoridades irresponsables, y, sobre todo, en el marco de una campaña electoral, que la derecha sabe que perderá, de ahí su desesperación.

No creemos que la ONU y la OEA se presten a la campaña sucia del Presidente Saca y el partido ARENA, de ahí que nuestro irresponsable mandatario se esté echando para atrás.

Hace dos días dijo, tras su regreso de los Estados Unidos, que no era necesario solicitar la intervención de la ONU y la OEA, para investigar dichas acciones.

Y es que no es cuestión de que no sea necesario, es que sería una ridiculez que las organismo como la ONU y la OEA, ya de por sí con algún desprestigio, se prestaran a validar actos de campaña política electoral. Y es que, el tema de El Paisnal, no es otra cosa más que una burda utilización electoral, por cierto de muy mal gusto, pero, conociendo a nuestra clase dirigente y política, no se puede esperar otra cosa.